Se presenta la primera edición del Encuentro Cicloturista “5 Abejas”, llamado a hacerse un hueco en el calendario de todo cicloturista amante de los retos. Su denominación es certera, como el aguijón de la abeja. Pero, no es uno, sino cinco aguijonazos, uno por cada puerto, que se van repartiendo a lo largo de sus 115 kilómetros. No obstante, los participantes se ahorrarán ese otro aguijonazo que suelen padecer al apuntarse a las marchas cicloturistas, en forma de pago por inscripción. Y es que, la “5 Abejas” nace con la vocación de promover la gratuidad.
Esta quedada en tierras bejaranas, y cuyo recorrido discurre saltando de uno a otro lado del Valle del Jerte, tiene un mítico antecedente en unas de las etapas mas calientes de la Vuelta a España de 2002, concretamente la que se disputó el jueves 26 de septiembre.
A su paso por Béjar los ciclistas ya habían recorrido 75 kilómetros desde Salamanca. Santi Blanco se escapó junto con otros cuatro compañeros en el kilómetro 10 y llegó en solitario a la temible Covatilla tras volver a atacarles en el puerto de Tornavacas, seguido muy de cerca por otro oriundo, Roberto Heras.
Los más de 200 cicloturistas que la organización prevé que participen en esta primera edición de la “5 Abejas”, se reunirán en Béjar para estar en el punto de salida el 31 de julio a las 8,00. Saldrán de Béjar En tandas de 30 cicloturistas separadas por 2 minutos entre ellas, con dirección a Extremadura. Tras un rapidísimo descenso, atravesarán Baños de Montemayor, localidad conocida por su Balneario y su artesanía de mimbre y castaño, para llegar en seguida a Hervás tras unos agradables kilómetros de llano, desde donde ya se vislumbrará la que será la primera ‘Abeja’ de la jornada, el puerto de Honduras.
1ª Abeja
El grupo, que previsiblemente todavía estará bastante compacto, comenzará a estirarse generando de forma natural diferentes grupetas en función del estado de forma de cada uno.
Se asciende este primer aguijonazo con las piernas todavía frescas por una carretera estrecha pero con buen firme, tierra de lobos y castaños, con una distancia de 9’1 kilómetros y un desnivel de 530 metros. Su 6’6% de media, permitirá que los ciclistas disfruten de él por no ser demasiado exigente. La bajada es larga y tendida, dejando entrever el espectáculo del Valle del Jerte.
Acaba el descenso con un giro a la izquierda para incorporarse a la carretera que atraviesa el Valle del Jerte. El relajo de las piernas durante la bajada hará que los ciclistas noten ese ‘picor’ de piernas característico cuando se vuelve a pedalear. No, no es que no estén finos, es que el terreno pica para arriba, sigilosamente, según se remonta el río que da nombre al valle camino de la segunda ‘Abeja’ del día, el puerto de Tornavacas.
2ª Abeja
Se trata de una subida que crea afición, suave, buena y ancha carretera y poco tráfico, que va culebreando según asciende dejando ver en cada curva una foto del valle, a cual más impresionante. Son 6 kilómetros con 353 metros de desnivel al 5’9% de media.
Tornavacas es uno de esos puertos que apenas tiene segunda vertiente y, más que descenso, apenas hay un leve desnivel al otro lado, hasta el Puerto Castilla y su refrescante fuente, justamente a los pies de la tercera ‘Abeja’ del día, el puerto de Tremedal.
3ª Abeja
En este punto, el que no vaya bien ya se puede mentalizar para sufrir hasta el final. Tiene ante sí un puerto duro por partida triple. Por su estrecha y descarnada carretera; sus 8 kilómetros de ascensión con 530 metros desnivel al 6’6% de media; y por afrontarlo con el cansancio en las piernas de los dos puertos acumulados ya.
Una vez coronado, los participantes no se pueden relajar porque deberán afrontar un descenso muy peligroso en su parte inicial, debido al mal estado del asfalto. La bajada acaba en Becedas, última oportunidad para repostar agua en lo que resta de etapa. Nada más salir del pueblo el paisaje cambia y, sin darnos cuenta, estaremos en las primeras cuestas de la cuarta ‘Abeja’, el puerto de la Hoya.
4ª Abeja
Un puerto que, sin el cansancio acumulado no merecería la pena comentar, es de los que se suben ‘a plato’ en otras circunstancias. Sus 6 kilómetros ascienden por una buena carretera que suma un desnivel de 202 metros.
Se corona, y aunque el sentido común y la inercia del camino pide a la bicicleta seguir recta hacia Béjar, el rutómetro impone su dictado y hay que girar a la izquierda con el ánimo templado para poder sufrir el quinto, último y más punzante aguijonazo, el puerto de la Covatilla.
5ª Abeja
Este calvario, ya de por sí muy ‘heavy’, lo será muchos más después de haber subido cuatro puertos antes. La quinta ‘Abeja’ tiene un recorrido de 9’2 kilómetros con un desnivel de 740 metros al 7’4% de media. No obstante, los ciclistas de la zona tienen su peculiar modo de afrontarlo para que no se les atragante. El Truco es mentalizarse en que no es para tanto, ya que lo más duro son sus primeros 4 kilómetros, con una media del 9’9% y rampas de mas del 16%. Después, uno se puede animar pensando que, como la parte final tiene bastantes desniveles negativos, casi, casi tenemos las “5 Abejas” en el bolsillo. Pero hay que pedaleárselas.
Para mas información, podéis escribir al correo del encuentro, las5abejas@hotmail.com, ó llamar al Telf.: 666 518 468